RECORDANDO AL PROFESOR JOSÉ FÉLIX PATIÑO RESTREPO


José Félix Patiño y la Academia Nacional de Medicina

Germán Gamarra Hernández, MD., M.Sc.¹

 

1. Presidente de la Academia Nacional de Medicina de Colombia 2021 - 2023

 

 

Correspondencia:

ggamarra2000@yahoo.com

 

DOI: 10.56050/01205498.2254




El doctor José Félix Patiño Restrepo ha tenido un vínculo con la Academia Nacional de Medicina de Colombia desde antes de su nacimiento. Su padre, el doctor Luis Patiño Camargo, especialista en enfermedades tropicales, fue presidente de la Academia en marzo de 1945, cuando reemplazó en el cargo al doctor Abraham Salgar posterior a su fallecimiento.



Por otra parte, su esposa fue la señora Blanca Osorio, nieta del doctor Nicolás Osorio y Ricaurte, médico egresado de la Universidad de la Sorbona de París quien junto con los doctores Manuel Plata Azuero, Abraham Aparicio Cruz, Evaristo García, Liborio Zerda y Leoncio Barreto conformaron la llamada Sociedad de Medicina y Ciencias Naturales de Bogotá, el 3 de enero de 1873, reconocida posteriormente como la Academia Nacional de Medicina.

Por lo anterior, no es difícil entender que, un médico como José Félix Patiño, desde su muy temprana juventud, recibió la influencia de su padre como modelo en el ejercicio profesional e investigativo de la medicina, pero también más adelante, muy posiblemente con la influencia de su esposa y su suegro, hijo del mencionado Nicolás Osorio y Ricaurte, le permitieron transitar por los orígenes y la trayectoria de la Academia, desde finales del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.


Con motivo de la celebración del Sesquicentenario de la Academia Nacional de Medicina de Colombia, el 9 de febrero de 2023, se entregó un libro que contiene las biografías de quienes han sido sus presidentes durante estos 150 años, por lo que me permito citar a continuación lo que allí aparece:


“José Félix Patiño Restrepo nació en la ciudad de San Cristóbal del Táchira, Venezuela, el 15 de febrero de 1927, cuando su padre se desempeñaba como jefe de Saneamiento en los valles de San Cristóbal, Cúcuta y aledaños, región donde logró la erradicación del vector de la fiebre amarilla urbana. Fue bautizado en Cúcuta, para tener su nacionalidad colombiana. Sus estudios elementales los hizo en el Colegio Alemán y la secundaria en el Gimnasio Moderno, graduándose de bachiller en 1944. Inició su carrera de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional, donde alcanzó a permanecer entre 1945 y 1948 pero, a raíz del “bogotazo” del 9 de abril de 1948, viajó a los Estados Unidos y estudió toda su carrera en la Universidad de Yale, New Haven, graduándose de médico y cirujano, en 1952 con el Premio Borden de investigación. Se especializó en cirugía general, torácica y cardiovascular en el Yale Haven Medical Center, culminando dicha formación en 1958. Desde ese año, fue docente en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional, donde ocupó el cargo de director de Educación Graduada. Tuvo a su cargo la dirección del Hospital Universitario de La Samaritana, en el cual permaneció de 1958 hasta 1978. Allí implementó la técnica de la nutrición parenteral total. Pasó luego a la jefatura del Departamento de Cirugía de la Fundación Santa Fe de Bogotá, cargo en el cual permaneció entre 1980 y 1993. Fue director ejecutivo de la Asociación Colombiana de Facultades de Medicina, ASCOFAME, entre 1959 y 1965. Del 7 de agosto de 1962 y hasta 1963, fue ministro de Salud, implementando en Colombia el uso de las drogas genéricas. Tuvo a su cargo la rectoría de la Universidad Nacional, de 1964 a 1967; desarrolló importantes cambios curriculares y administrativos que le valieron el nombre de “Reforma Patiño”. En 1966 fue nombrado director ejecutivo de la Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades (Escuelas) de Medicina, (FEPAFEM), cargo que mantuvo de 1967 a 1976. Hizo parte del grupo de fundadores de la Fundación Santa Fe de Bogotá, a fines de la década de 1970. Tuvo a su cargo la dirección de la Fundación OFA para el avance de las ciencias biomédicas, entre 1979 y 1984. Presidió varias asociaciones científicas nacionales e internacionales, incluida la International Society of Surgery/Societé Internationale de Chirurgie, entre 1980 y 1993. Autor de al menos 17 libros y folletos y más de 500 trabajos publicados, ingresó a la Academia Nacional de Medicina, como Miembro Correspondiente, en 1972 y fue promovido a Miembro de Número en 1975. Presidió la Academia del 19 de marzo de 1998 hasta el 21 de marzo de 2002. Fue el principal motor de la creación de la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes, convirtiendo a la Fundación en Hospital Universitario. Fue nombrado jefe honorario del Departamento de Cirugía del Hospital Universitario Fundación Santa Fe de Bogotá. Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Colombia; maestro en cirugía honoris causa de la Universidad de Antioquia y profesor titular de la Universidad de Los Andes. Recibió numerosas distinciones y condecoraciones, nacionales e internacionales Reconocido humanista, su biblioteca personal cuenta con más de 11.000 volúmenes. Amante de la música. Escribió un libro titulado “María Callas. La Divina. Prima Donna Assoluta. La voz de oro del siglo XX” en Bogotá, el 26 de febrero de 2020.”


La vida académica y profesional del Dr. José Félix Patiño se identifica de forma plena con lo que constituye la esencia de la Academia Nacional de Medicina; si observamos los objetivos y misión de esta Corporación científica, estoy seguro que los encontramos bien desarrollados en el actuar del Dr. Patiño. Solo para recordar: la Academia es una institución científica sin ánimo de lucro, organismo consultor y asesor del Gobierno para todos los asuntos relacionados con la Salud Pública del pueblo colombiano y la Educación Médica. Tiene como misión
“contribuir al estudio y progreso de la Medicina, de la Educación Médica y la Investigación Científica, auspiciar el adelanto de las ciencias afines y las tecnologías complementarias, propender por la ética, el buen ejercicio profesional y el desarrollo humanístico del médico…”

De manera muy breve y después de conocer una síntesis de su hoja de vida anteriormente expuesta, encontramos que después de lograr una sólida formación profesional como médico y especialista en Cirugía general en la Universidad de Yale en los Estados Unidos, regresa al país y su vida y ejercicio profesional, transcurren entre la Salud y la Educación Médica. A los pocos años de su regreso al país, ejerce el cargo de Ministro de Salud y posteriormente es nombrado como Rector de la Universidad Nacional de Colombia en donde realiza una gran transformación académica y administrativa de la institución conocida como la “Reforma Patiño”. Hoy día, se reconoce por parte de los académicos y profesores de la Universidad, la importancia de dichos cambios.


Su paso por la jefatura del Departamento de Cirugía del “Hospital La Samaritana” en Bogotá y como docente de la Universidad Nacional son recordados por quienes fueron sus discípulos. Posteriormente tuvo una destacada labor en el desarrollo y consolidación exitosa de la conocida hoy como Fundación Santa Fe de Bogotá, una de las más importantes instituciones de salud que existen actualmente en Colombia.

Como educador, ya se mencionó su rectoría en la Universidad Nacional, además fue director ejecutivo de FEPAFEM (Federación Panamericana de Facultades de Medicina) durante 10 años y primer director ejecutivo de ASCOFAME (Asociación Colombiana de Facultades de Medicina). Durante su ejercicio profesional como médico y cirujano, siempre se caracterizó por su permanente disposición a formar integralmente a sus discípulos, no solo en el campo técnico y profesional, sino en el científico y humano. Durante su labor en la Fundación Santa Fe, lideró el grupo de trabajo que creó la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes en la ciudad de Bogotá.


José Félix Patiño Restrepo ingresa como Miembro Correspondiente a la Academia Nacional de Medicina en 1972 y es promovido a Miembro de Número en 1975. Su liderazgo en la institución fue notorio durante los casi 50 años en los que participó en múltiples actividades; fue presidente de la Academia durante cuatro años, entre 1998 y 2002. Vale la pena destacar su labor como coordinador de la Comisión de Salud de la Academia en la que lideró múltiples debates alrededor de los cambios en el ejercicio profesional de la medicina derivados de la aplicación de la Ley 100 de 1993; participó también en discusiones de normas como la Ley de Talento Humano en Salud (Ley 1164 de 2007) y las modificaciones a la Ley 100, introducidas por la Ley 1438 de 2011. Finalmente, su participación fue muy notoria cuando se constituyó en la Academia, la Gran Junta Médica que desarrolló el proyecto que culminó como Ley Estatutaria de Salud (Ley 1751 de 2015).


La Biblioteca Jorge E. Cavelier de la Academia Nacional de Medicina fue otra de sus grandes pasiones. José Félix Patiño, consideraba a la Academia como su segundo hogar y allí en la Biblioteca, después de ejercer la presidencia, encontró su refugio. Aportó múltiples obras de su biblioteca personal y le imprimió el distintivo que tiene este recinto; afirmaba Patiño que la biblioteca debía tener su fortaleza en Historia de la Medicina y en Humanidades. De esa forma, impulsó la consecución de las más variadas obras en estos temas. A su vez, promovió que otras instituciones académicas reconocieran esta orientación. Allí conformó la Sala “Luis Patiño Camargo”, como homenaje a la memoria de su padre.

No puedo dejar pasar la oportunidad de recordar algunos aspectos personales sobre mi relación con el académico José Félix Patiño; hacia el año 1993, tuve la oportunidad de tratar y conocer al profesor José Félix Patiño Restrepo, cuando me desempeñaba como Decano de la Facultad de Salud de la Universidad industrial de Santander, en Bucaramanga. El Dr. Patiño en su labor de educador y en representación de FEPAFEM, visitaba las diferentes escuelas de Medicina del país. Adicionalmente promovía sus ideas sobre lo que debía ser la formación de los médicos y escuchábamos con atención su propuesta de “la mano con sus cinco dedos” en la que señalaba que los currículos de medicina debían tener la suficiente flexibilidad para que un estudiante, desde etapas muy tempranas de su formación, pudiera escoger su área de profundización en diferentes campos de la medicina: clínica, salud pública, investigación, administración, ciencias básicas biomédicas.


Hablaba Patiño en los años 90 y con mucha propiedad sobre la “
Infomedicina”; hoy es una realidad, pero en ese entonces parecía ficción para la mayoría de los que lo escuchábamos. Podemos decir que José Félix Patiño, fue un visionario en este como en otros campos. Explicaba que “la informática la deberíamos ver como un método de razonamiento, fundamentalmente un amplificador intelectual. Así como las máquinas de la revolución industrial fueron amplificadoras de la capacidad física del hombre, el computador es un amplificador de su capacidad intelectual”.

Otro tema que hacía parte de las frecuentes conversaciones con el académico Patiño era el del profesionalismo médico; consideraba el Dr. Patiño que la reforma a la salud, implementada con la Ley 100 de 1993, causada la desprofesionalización de la medicina. Anotaba que, al convertir la salud en un negocio y crear incentivos económicos a los médicos, se perdía la esencia humana de la profesión. El profesionalismo médico debe soportarse en cuatro componentes fundamentales: muy buen y actualizado conocimiento científico, ejercicio médico con autonomía pero con autorregulación, humanismo (tal vez, humanitarismo) y comportamiento ético.


No es posible referirse al profesor Patiño, sin mencionar su pasión por la música clásica y en particular por la ópera y la diva María Callas, de quién escribió una muy completa biografía. Consideraba que María Callas fue una mujer brillante durante el siglo XX, posiblemente la mejor soprano de todos los tiempos y que su vida fue una mezcla de tragedia y cuento de hadas. El conocimiento de
Patiño sobre la música y otros temas no necesariamente relacionados con su profesión, hablan de la dimensión de un verdadero hombre culto y humanista en el mejor sentido de la expresión.

En el año 2012, José Félix Patiño, junto con Jorge Cavelier Gaviria y Efraím Otero Ruiz, me invitaron y me motivaron para ingresar a un cargo de la Junta Directiva de la Academia Nacional de Medicina; desde entonces he estado de manera continua, participando en las decisiones de esta noble institución. Durante este ejercicio, siempre recibí la orientación del académico Patiño.

Fallece el académico José Félix Patiño Restrepo el 26 de febrero de 2020, después de cumplir 93 años de edad en la ciudad de Bogotá. Fue un verdadero maestro y ejemplo de vida y como lo manifestó el Dr. Roberto Esguerra Gutiérrez, el día de sus exequias “lo humano lo gobernaba, lo conmovía. El ejercicio de la profesión médica no lo concebía sino en el marco de una actividad profundamente humana, en donde la capacidad de ponerse en el lugar del paciente, de entender y vivir su sufrimiento, como expresión máxima del altruismo, constituía la base moral de la profesión”.